Reseña y crítica de la temporada 2 de "Snowfall" (2017)
"Snowfall", la serie creada por John Singleton, Eric Amadio y Dave Andron, ha logrado consolidarse como un referente en el drama criminal contemporáneo, especialmente en su segunda temporada, que se estrenó en 2018. Esta entrega profundiza en la complejidad de la epidemia de crack que asoló Los Ángeles en los años 80, entrelazando las historias de sus personajes con un trasfondo social y político que resulta fascinante y profundamente inquietante.
La temporada 2 continúa la narrativa centrada en Franklin Saint (Damson Idris), un joven vendedor de drogas que se encuentra en el epicentro de un sistema que lo consume. La evolución de Franklin es palpable; su ambición y deseo de poder lo llevan a tomar decisiones cada vez más arriesgadas, lo que a su vez desencadena una serie de eventos trágicos y violentos. Idris ofrece una actuación conmovedora, mostrando la lucha interna de un joven que intenta navegar en un mundo que parece devorarlo.
Uno de los aspectos más destacados de esta temporada es la exploración del impacto de la guerra contra las drogas en la comunidad afroamericana, un tema que la serie aborda con una mezcla de realismo y crítica social. La relación entre Franklin y su madre, Cissy (Michael Hyatt), se profundiza, mostrando el efecto devastador de las decisiones de su hijo en su familia. La actuación de Hyatt es poderosa, añadiendo una capa emocional que resuena a lo largo de la temporada.
Además, la serie introduce nuevos personajes que enriquecen el relato. La figura de Gustavo "El Oso" Zapata (Sergio Peris-Mencheta), un luchador mexicano que se ve atrapado en el mundo de las drogas, aporta una nueva perspectiva al conflicto y se convierte en un aliado inesperado para Franklin. Su historia es un recordatorio de cómo la lucha por sobrevivir puede llevar a las personas a tomar decisiones moralmente ambiguas.
La dirección de la temporada es sobresaliente, con un ritmo constante que mantiene al espectador al borde de su asiento. Cada episodio se siente como un ladrillo en la construcción de un edificio narrativo complejo, donde cada acción tiene consecuencias y cada decisión se siente como un paso hacia lo inevitable. La cinematografía también destaca, capturando la esencia de Los Ángeles en los años 80 con una atención al detalle que transporta al espectador a esa época.
Sin embargo, la temporada no está exenta de críticas. Algunos espectadores pueden encontrar que la trama se vuelve un poco densa en ciertos momentos, y que la cantidad de personajes a veces dificulta la conexión emocional con todos ellos. No obstante, esto también puede verse como una representación fiel de la complejidad de la vida en un entorno donde tantas historias se entrelazan.
En conclusión, la segunda temporada de "Snowfall" es una obra maestra que combina drama, acción y una crítica social incisiva. A medida que los personajes navegan por sus dilemas morales, la serie invita a la reflexión sobre los efectos devastadores de la guerra contra las drogas y sus repercusiones en la sociedad. Con actuaciones sólidas y una narrativa cautivadora, "Snowfall" se reafirma como una de las mejores series de su tiempo, dejando a los espectadores ansiosos por más.